1.- La educación y la infancia https://psicoestudioaprendizaje.home.blog/2021/07/23/el-amor-y-su-concepcion-psicologico-social-cultural-y-educacional-los-cuatro-parametros-basicos-de-incidencia-practica-en-cualquier-sociedad-1-la-educacion-y-la-infancia/
He empezado esta serie, que pretede ser eclectica y multidisciplinar por esta parte primera anterior, que os acabo de dejar en un enlace, porque hoy en día, más que nunca, considero que la base de una buena estructura psico-emocional que respete el amor pleno, integrador, empieza por la educación. Desde edades tempranas.
Me baso en ellos, y tomaré en consideración, algunos libros leídos de excelentes autores, junto con una mínima acumulación del conocimiento al respecto de este tema y las disciplinas que lo abordan en psicología o determinadas escuelas porque, como siempre advierto, no soy psicóloga ni psiquiatra, sino que me gusta aprender y documentarme y lo he hecho en el tiempo de algunos años a esta parte.
Pretendo abordar una genealogía historicista y pluritemática del amor, en un concepto amplio respecto de su bagaje integral, incluyendo la filantropía por la vida misma, pero también señalando los rasgos empáticos relacionados con el amor de pareja, cuyas nociones teóricas y de praxis personal he ido adquiriendo, si bien, reconozco que muy o demasiado básicas, para ser humilde.
Los cuatro parámetros a los que hago referencia, como explicación concreta del título de la serie, son básicamente, la fisiología o criterio biologista que explica en parte el origen y la evolución de los transtornos clínicos como la depresión, el estrés o la ansiedad, que son los más comunes, basándome en lo que dice la ciencia y el DSM o el CIE, y la psicologia clínica, abarcando para su análisis los tipos de terapia y la busqueda de una etiología o causa concreta apoyándome en la información vertida en libros y apuntes de universidad que he obtenido; en segundo lugar, el amor en su perspectiva psicológica, aplicada al pensamiento o cogniciones y también a la conducta, por vínculo analógico, es decir, ofrecer una visión cognitivo-conductual, mejor dicho, cognitivista, de aquella materia referida igualmente a la personalidad del individuo en términos muy genéricos, donde los patrones rígidos o estáticos se abordan como las fundamentales generalidades del comportamiento humano en cualquier civilización, obviando los ritos, modas y costumbres especificos, lógicamente, para su entendimiento epistemológico adecuado, pues no es un tratado sociologico ni antropológico, si bien el punto de vista de la psicología social pueda y deba estar presente; en tercer lugar, el amor ligado a la cultura como estrato de enriquecimiento personal y grupal, de uno mismo y de su entorno, incluso de una civilización cualquiera que se precie; y, por último, las emociones y la autoestima para conseguir tener una visión o cosmovisión más ampliada de lo que se podría considerar la autorrealización o el culmen metodológico de la búsqueda de la felicidad humana como aspiración o camino vital.
Sé que son diversos temas y materias a abordar referenciados por un sentimiento puro y absoluto tan elevado como el amor en muchas de sus consideracioes y. sin embargo, procuraré no salirme del guión de la ciencia experimental y empirica, científica, en cuanto a la psicología. Todo aquello que de mí pueda ofrecer, aun cuando pueda incurrir en algún error lógico-empírico, pero esperemos que no sea así. Intentaré jerarquizar y ordenar las cuestiones inferidas o referidas lo mejor posible desde mi nivel de aprendizaje. Como ya sabéis, este es un blog de estudio y experiencial.
Otros temas a colación muy importantes, desde mi punto de vista, son: la espiritualidad ligada al amor y al existencialismo, al día a día, así como expresar de forma crítica algo que he encontrado en la sociedad actual, un peculiar y cada vez más extendido criterio de interacción con el entorno y con los demás que presenta un carácter recurrente, y lo resumiría así, esto es, el hecho de que lo funcional en apariencia, correspondiente a la vida y del ser, del comportamiento, se convierte de forma subterfugia en una suma de patrones disfuncionales de conducta en algunas personas, considerándose a un nivel, la representación de una normativización de lo malo dentro de ciertas acciones sociales y que preocupa. Sin concretar mucho, por ejemplo, la violencia hacia la mujer, hacia colectivos definidos, la codependencia (desde el punto de vista de cómo la aborda la psicologia sistémica se comprende muy bien en las familias cuando ésta se produce), el amor visto como banalización de los sentimientos, rebajándolos en su cuota de emociones positivas, que son sustituidas por sucedáneos, como si fueran éstos los valores más superficiales de enjuiciamiento de situaciones y de problemas los que debieran de aflorar para lograr ser más competitivos y exitosos, es decir, el reflejo de lo que dice una cierta cultura light, propiciada por la cultura misma del nuevo hombre, un ser motivado por el placer per se y el hedonismo, antes que por buscarse a sí mismo desde dentro, etc. Ver normal actitudes nada prácticas o muy perniciosas para la vida en plenitud es algo a revisar, no porque se esté de acuerdo, claro que no, sino porque sucede con demasiada relatividad, frecuencia o intensidad. En ocasiones de forma subliminal. Se da por hecho que ocurre. Y no debería ocurrir. Si vemos los sucesos recientes en la TV nos daremos cuenta de algunos ejemplos, dramáticos, muchos de ellos.
No descarto los ejemplos pragmáticos o paradigmáticos a la hora de aclarar algunas ideas, conceptos y razonamientos bastante comunes en las dinámicas de grupo. Y en individuos tipo. O que presentan una tipologia acorde al tema unipersonal que nos ocupe, para entender mejor de lo que hablo. Que se puedan encontrar fácilmente dentro de la casuística clínica o psiquiátrica, pero explicado a mi manera.
He leído libros de Pilar Varela, Luís Rojas Marcos, Ramiro Calle, Bernabé Tierno, Enrique Rojas, y otros autores como Dyer, Daniel Goleman, Beck, Ellys, Palazzoli, y otros más. Sin embargo, no trasladaré textualmente lo que refieren los libros, no son reseñas, sino enseñanzas extraídas a modo de conclusión basándome en sus tesis científicas. Y parto del conocimiento acumulado y de lo que he leído en webs o blogs especializados en psicología.
No soy nada pretenciosa, tan solo quiero aprender.
Gracias por la comprensión y por la lectura de este apéndice y, en general, de otros artículos.